Son valores
numéricos que intentan medir lo desparramados que están los datos respecto de su
centro.
Si elegimos como centro la media, el desparrame puede medirse utilizando
las desviaciones (1) de los datos a la media.
Conviene tener en cuenta las
desviaciones de todos los valores. Si las sumamos, siempre nos sale cero; por
eso sumaremos sus valores absolutos, sus cuadrados, etc. Procediendo de
este modo puede pasar que un conjunto de datos salga más desparramado
que otro simplemente porque tiene más elementos. Por eso parece razonable tomar
promedios. Todo esto motiva las siguientes medidas de dispersión.
xi =
valor de la variable estadística, o marca de clase si están agrupados por intervalos.
La
justificación del uso de la raíz cuadrada en la desviación típica (3) está en que la
varianza (2) sale medida en las unidades de partida elevadas al cuadrado.