La diferenciabilidad de una función de varias variables permite
generalizar el concepto de derivabilidad de una función de una variable.
Podríamos pensar que, si la recta tangente era
la línea más sencilla que tenía el contacto mayor con una curva
en un punto dado, en el caso de la superficie será el plano
tangente el que haga ese papel.
El plano tangente es, en efecto, la
superficie más sencilla, está dado por una función de primer
grado en dos variables, z= f (x, y) = ax+by+c, afín o lineal
según sea c, es decir, la ampliación para dos variables de lo que
era la recta con una.
Puedes mover el punto rojo de la figura de la
derecha para visualizar esta idea.
Consideramos una función de dos variables z=f(x,y) cuya gráfica es una superficie S en ℝ3.
El hecho de que un plano que pasa por el punto P(a, b, f(a,b))
z=f(a,b)+A(x−a)+B(y−b)
aproxime a S en el punto P, se puede expresar matemáticamente
como:
Se puede probar que para que el límite
anterior sea cero se ha de cumplir:
A=∂f∂x(a,b)B=∂f∂y(a,b)
Definición (Diferenciabilidad).- Si f es una función definida y acotada en un dominio D que admite derivadas
parciales en el punto (a, b) perteneciente al dominio y
cumpliendo que:
entonces se dirá que la función f es diferenciable en el
punto (a, b).
Se llama plano tangente a
una superficie diferenciable en un punto P de la misma, al plano que
contiene todas las tangentes a las curvas trazadas sobre la
superficie por el punto P. Puede probarse que el plano z=f(a,b)+∂f∂x(a,b)(x−a)+∂f∂y(a,b)(y−b)
es el plano tangente a la superficie S gráfica de la función z=f(x,y) en el punto (a, b,
f(a,b)).